16 mar 2010

CONDICIONAMIENTO CLÁSICO Y CONDICIONAMIENTO OPERANTE

CONDICIONAMIENTO CLÁSICO

El condicionamiento clásico es un tipo de aprendizaje asociativo que fue demostrado por primera vez por Iván Pávlov y desarrollado por los conductistas, especialmente Watson.
Consiste en asociar un estímulo neutro a una determinada conducta.
Se suele utilizar para establecer rutinas en el aula o para asociar estímulos.

Algunos ejemplos que se pueden aplicar en el aula:

1. La campana del colegio, cuando esta suena los niños asocian este momento con que se van de clase. Así, cada vez que suena la campana los niños saben que es el momento en el que tienen que recoger las cosas porque es la hora de irse.

2. Al entrar un profesor a clase, inmediatamente los alumnos guardan silencio y se disponen a tomar apuntes y escuchar.

3. Usualmente un golpe o un castigo verbal provoca respuestas emocionales y respuestas de huída. Si quién otorga los golpes y los castigos verbales es el maestro ( estímulo neutro en un principio) bastaran algunas asociaciones para que la sola presencia del maestro produzca la misma respuesta que los golpes.


CONDICIONAMIENTO OPERANTE

Los principios del condicionamiento operante fueron desarrollados por B.F. Skinner, quien recibió la influencia de las investigaciones de Pavlov y de Edward L. Thorndike.
El condicionamiento operante es una forma de aprendizaje en la que la consecuencia (el estímulo reforzador) es contingente a la respuesta que previamente ha emitido el sujeto. El condicionamiento operante implica la ejecución de conductas que operan sobre el ambiente.

Este condicionamiento es un tipo de aprendizaje asociativo que tiene que ver con el desarrollo de nuevas conductas en función de sus consecuencias, y no con la asociación entre estímulos y conductas reflejas existentes como ocurre en el condicionamiento clásico.
El condicionamiento operante se manifiesta generalmente en los refuerzos, tanto positivos como negativos.

Algunos ejemplos que se pueden aplicar en el aula son:

1. Hacerles gestos agradables, ponerles sonrisas cuando realicen correctamente una actividad.

2. Otro ejemplo seria mediante caras. El profesor pone caras sonrientes, normales o tristes dependiendo de cómo se ha hecho el ejercicio, así el que mas caras tenga al final del curso se le dará un premio que sea importante para él.

3. El alumno que más libros lea durante el curso o qué mejor realice una actividad de animación a la lectura, se le regalará un libro.

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